Universidad del Zulia - Facultad de Humanidades y Educación
Encuentro Educacional
e-ISSN 2731-2429 ~ Depósito legal ZU2021000152
Vol. 32 (1) enero - junio 2025: 48 - 65
Educación en Valores y su Integración con la Disciplina
Educación Física en Estudiantes de Básica Secundaria
Fabian Alexis Zapata Arce y Carlos Alberto Campo Ortiz
Universidad Autónoma del Caribe. Barranquilla-Colombia
faza462@gmail.com; betolee811126@gmail.com
https://orcid.org/0009-0007-6528-156X; https://orcid.org/0009-0005-6104-1054
Resumen
Actualmente, la aplicación de valores en las diferentes actividades diarias del ser humano se
evidencia deficiente. Estudios revelan que la educación física puede brindar aportes
significativos para afianzar valores en los estudiantes, considerando su carácter recreativo y
amigable. El objetivo del estudio es analizar la educación en valores y su integración con la
disciplina educación física en estudiantes de básica secundaria en Barranquilla, Colombia. La
metodología utilizada fue cuantitativa, con diseño no experimental, transaccional y de campo. La
muestra estuvo constituida por 9 docentes y 153 estudiantes de instituciones educativas de
Barranquilla; como técnica e instrumento de recolección de datos se utilizó la encuesta y un
cuestionario estructurado por 33 ítems, con escala tipo Likert con 5 alternativas de respuestas:
siempre, casi siempre, algunas veces, casi nunca y nunca. En los resultados se determinó que los
participantes dan importancia a los valores y a los aspectos físicos, cognitivos y sociales, lo que
cual es fundamental en la planificación de actividades para incentivar una educación en valores
entre los estudiantes, con el apoyo de la educación física. Las conclusiones están dirigidas en
precisar cómo la pedagogía en valores puede fortalecer de manera significativa los principios
éticos y morales en los estudiantes, partiendo de la práctica de actividades físicas, deportivas y
recreativas propias de esta disciplina.
Palabras clave: educación en valores, educación física, deporte, recreación, educación
básica secundaria
Values Education and its Integration with Physical Education Discipline in
Secondary School Students
Abstract
Currently, the application of values in various daily activities is evidently deficient. Studies
reveal that physical education can provide significant contributions to strengthening values in
students, considering its recreational and friendly nature. The objective of this study is to analyze
values education and its integration with the physical education discipline among elementary and
secondary school students in Barranquilla, Colombia. The methodology used was quantitative,
with a non-experimental, transactional, and field design. The sample consisted of 9 teachers and
153 students from educational institutions in Barranquilla. The data collection technique and
instrument used was a survey and a 33-item questionnaire structured with a Likert-type scale
with 5 response options: always, almost always, sometimes, almost never, and never. The results
determined that participants attach importance to values and to physical, cognitive, and social
aspects, which is fundamental in planning activities to encourage values education among
students, supported by physical education. The conclusions are aimed at specifying how values-
based pedagogy can significantly strengthen ethical and moral principles in students, based on
the practice of physical, sports and recreational activities specific to this discipline.
Keywords: values education, physical education, sport, recreation, basic secondary
education
Introducción
La sociedad viene enfrentando cambios substanciales que se reflejan en la cotidianidad y
el quehacer de las diversas instituciones que la conforman, tales como la familia y los centros
educativos. Según Fragoso y Canales (2009) las personas forman sus valores mediante el proceso
de la socialización, la cual se presenta en el seno de la familia y en la escuela. Una de las
características que se da en la familia es la carga afectiva con la que se transmiten las ideas,
saberes e identificación con el entorno, presentadas por los adultos; en consecuencia, los padres
deben realizar este proceso de forma consciente, para educar a sus hijos en valores que permitan
acercarse al mundo real.
Sin embargo, el convivir socialmente puede generar confrontaciones y crisis estructurales
en diversos aspectos; cambios que ocasionan desavenencias y malos entendidos entre quienes
tienen opiniones opuestas. En este contexto, la escuela no escapa a esta realidad, pues en ella
conviven diariamente una multitud de estudiantes con diversas cargas culturales, producto de
valores propios en sus familias, y de las experiencias vividas dentro de su contexto social, lo cual
implica el tipo de actitud que tomen dentro de los espacios donde se desenvuelven e interactúan.
Tomando en cuenta estos aspectos, no es extraño observar, debido a las diversas formas
del concebir el mundo por cada uno de los sujetos que se relacionan dentro de las instituciones
escolares, que en ocasiones existen conflictos producto de posiciones antagónicas frente a
situaciones específicas. Se puede decir, que el problema no radica porque existan diversidades de
pensamientos u opiniones, sino por conflictos que en ocasiones se producen entre estudiantes, los
cuales en muchos casos trascienden más allá de discusiones verbales, para convertirse en
altercados donde la agresividad y el irrespeto se hacen presentes.
En concordancia con lo expuesto, Cabrera (2023) señala que la problemática que se
evidencia en las instituciones educativas es debido a varios factores: (a) falta de políticas
educativas y sociales de conciencia ciudadana, con énfasis en principios éticos y valores, (b)
escasa integración de los procesos educativos con la ética y valores en la formación de los
estudiantes, (c) insuficiente fomento de la ética y los valores en las actividades cotidianas de
enseñanza y aprendizaje, y su impacto en la sociedad, (d) escasa superación del educador en el
desempeño aboral con la ética y valores, que conlleva a una baja preparación, y (e) insuficiente
compromiso de los docentes, estudiantes y padres o representante, por el fomento de valores en
la comunidad educativa y entorno social.
En relación con los elementos a considerar sobre esta situación de crisis escolar, en el
contexto colombiano se perciben aspectos como el desconocimiento por parte del docente de
educación en valores, que permitan al alumno ser actor de su propio aprendizaje, desarrollando
habilidades y destrezas cognoscitivas que lo capaciten para enfrentar los problemas de la
cotidianidad; así como también una inadecuada acción mediadora que podría repercutir en la
actitud del estudiante hacia el aprendizaje y en las relaciones con sus compañeros.
Igualmente se percibe que la formación en valores ha disminuido gradualmente con el
paso del tiempo, donde la etapa de la adolescencia se ha considerado un espacio difícil para el
proceso de desarrollo de los estudiantes, visualizándose con bastante notoriedad como hoy en día
en la juventud tiene una crisis de identidad, donde en ocasiones experimentan rebeldías
manifestadas en conflictos frente a las autoridades educativas, padres o amistades, lo que se
traduce en una problemática que pudiese ser un caldo de cultivo para el consumo de alcohol,
drogas y otras situaciones graves, como delincuencia.
La situación anteriormente planteada se presenta con mayor frecuencia en las poblaciones
socioculturales de bajos recursos, compuestas en la gran mayoría por personas que han tenido
pocos estudios o no culminan las actividades académicas en una institución educativa; y en otras
circunstancias provienen de familiares disfuncionales, razones donde los espacios laborales de
estas personas no se encuentran en un entorno donde tenga presencia la educación en valores.
Particularmente, Botero (2005) expresa que en Colombia ha habido una crisis de valores
que han sido originada por diversas causas y los resultados se expresan en la sociedad
colombiana. Describe cuatro contradicciones básicas que permiten justificar esta crisis: "a) Entre
educación versus instrucción que forma individuos que pierden el sentido de servicio social o
bien común. b) Entre bienestar y calidad de vida versus consumismo. c) Paz y justicia versus
conflicto armado. d) honestidad y transparencia versus corrupción y vida fácil (p. 12).
Al respecto, en los últimos años en Colombia, los niños y jóvenes se han venido
formando en una sociedad donde lo que más interesa es lo material, por esto las personas
terminan siendo más valoradas por lo bienes materiales, dinero, puestos laborales e influencias
de amistades y no por razones que puedan brindar acciones humanas a través de una educación
en valores. Esto, pudiese demostrar que en ocasiones la escuela y la familia no están cumpliendo
a cabalidad su rol de formar la niñez y la juventud como debería ser.
Luego, las orientaciones morales y éticas en la escuela son una necesidad impostergable;
es necesario una verdadera formación integral donde se incluya explícitamente la educación en
valores, como una tarea asumida y desarrollada por educadores idóneamente formados, en la
búsqueda de una mejor preparación académica en todas las asignaturas del pensum de estudio,
incluyendo la educación física, recreación y deporte.
En concordancia con los aspectos referenciados, por ser la educación física una disciplina
donde el estudiante puede interactuar de manera directa con el docente, al estar la mayor parte
del tiempo en espacios abiertos, brinda la posibilidad de despertar motivación durante su
ejecución, al combinarse actividades físicas y recreativas propiciadoras de comportamientos
amigables entre estudiantes y profesores. Esto permitirá una buena conformación de valores,
como la amistad, solidaridad, respeto, empatía, donde de manera eficiente los estudiantes logren
afianzar un verdadero proceso educativo, mediante las actividades inherente a esta asignatura, las
cuales son vitales para el desarrollo integral como ser humano, en la búsqueda de una mejor
calidad de vida.
Por otro lado, la formación de valores en los estudiantes, particularmente de básica
secundaria, y tomando en cuenta los aspectos físicos, cognitivos y sociales de la educación física,
pueden ofrecer aportes significativos para su desarrollo y consolidación. Es importante tomar en
cuenta el carácter recreativo y divertido que tienen estas actividades en el ser humano, por ser
aspectos propiciadores de la motivación en la consecución de una verdadera formación integral
del educando.
El objetivo del estudio fue analizar la Educación en Valores y su integración con la
disciplina Educación Física en estudiantes de Básica Secundaria en Barranquilla, Colombia.
Fundamentación Teórica
Educación en Valores
En opinión de Sarramona (2008), la educación “consiste en distribuir la cultura, para que
el hombre organice sus valores en su conciencia y a su manera, de acuerdo con su
individualidad” (p. 31). Así, resulta relevante el proceso de desarrollo integral del ser humano a
través de la transmisión de palabras, acciones, sentimientos, actitudes y participación dentro de la
sociedad, a partir de la educación en valores.
Según UNIR (2024), la educación en valores tiene como fin alcanzar una mejor sociedad,
más justa, equitativa y solidaria, estableciendo normas de convivencia con respeto, ética,
tolerancia y empatía; sus principales características son: (a) desarrollo de los aspectos éticos y
morales de los individuos, (b) respeto y comprensión de lo diferente, (c) empoderamiento y
autonomía individual, (d) gestión de emociones y sentimientos, (e) comprensión de problemas
mundiales, y (f) cooperación en la búsqueda de solucionar problemas colectivos.
En concordancia con lo expuesto, el profesor de educación física, desde su labor
pedagógica, debe enfocarse en brindar orientaciones y actividades de esta disciplina dirigidas
hacia los padres, representantes, personal docente, directivos y estudiantes, que contribuyan a
complementar la formación en valores de forma efectiva y los ayuden a alcanzar metas e ideales.
Pedagogía en Valores
Frabboni (2010) describe que la pedagogía es la educación integral y multidimensional de
la persona (p. 19), para ello necesita contar sistemáticamente con la experiencia educativa, a
partir de modelos de integración que abarquen la teoría descriptiva de valores y la teoría crítica
del conocimiento.
Arana y Batista (2015) plantean que la pedagogía en valores, se centra en dos componentes
curriculares; primero, los principios orientadores mediante la ética, responsabilidad y formación
humanística; segundo, constituido por los medios de organización que incluyen métodos,
estrategias y actividades de aprendizaje, desde la descripción hacia la reflexión. Es
imprescindible integrar los valores al aprendizaje de manera de manera intencionada y
consciente, relacionándolo con el contenido valorativo del conocimiento.
Rol del Docente
Se entiende como rol del docente a la función que desempeña el educador en el proceso
de enseñanza y aprendizaje. Al respecto, Mujica-Sequera (2015) manifiesta que el rol docente
además de ser un transmisor de conocimientos, es un agente socializador que, con su práctica,
enseña valores que van a influir de significativamente en la formación de los aprendices,
exigidos por el mundo actual. Según Morillo et al. (2019), los roles primordiales que deben
cumplir los docentes deben centrarse en facilitar y promover experiencias, orientar y guiar
actividades centradas en el estudiante, para incrementar su motivación e interés.
Entre los roles que debe cumplir el docente en su ámbito pedagógico se encuentran:
Orientador
Es quien suministra al alumno estrategias y bitos efectivos que generen bienestar,
armonía y calidad de vida. Morillo et al. (2019), declaran que las funciones del docente como
orientador deben ayudar a los estudiantes a conocerse, comprenderse, responsabilizarse e
involucrarse en su crecimiento personal y académico; ayudarlos a descubrir y superar sus
potencialidades y limitaciones; orientarlos en la toma de decisión vocacional, considerando sus
intereses, aptitudes y actitudes. De igual modo, González (2018) expresa todo docente como
orientador cumple con su rol, puesto que en primera instancia desarrolla la responsabilidad de
orientar a los niños dependiendo de la dificultad que se presente dentro de las actividades del
aula.
Promotor Social
Cuando se habla de promotor social se refiere a estimular la organización, coordinación y
participación en los procesos escolares. Señalan Del Pozo et al. (2017), que el docente es un
modelo socializador que centra su instrucción a una convivencia institucional íntegra, dentro de
cualquier escenario familiar, educativo o social que pueda confrontar diferentes cambios
sociales, económicos, políticos y tecnológicos que se proyectan en el ámbito educativo. y
prevenir, consecuencias desfavorables. Farías-Veloz et al. (2022) opinan que desde lo que la
política y la sociedad demanda, el rol del docente debe estar encaminado a ser un promotor del
cambio social y cultural, que contribuyan a beneficiar el desarrollo del Estado en temas
educativos.
Investigador
Todo docente investigador parte de enseñar sus conocimientos a través de del análisis e
interpretación de las vivencias de la realidad social de su entorno, donde se construyen sus
saberes más relevantes. Para Delgado y Alfonzo (2019) este rol implica reflexionar
constantemente con actitud crítica sobre lo aprendido en su formación y compartir los saberes
con otros profesores y estudiantes, asociando lo que se aprende e investiga y lo que se enseña y
el para qué. Esto lleva a considerarse como un representante reflexivo que articula la praxis
docente con la investigación
Morillo et al. (2019) plantean que las funciones del docente investigador implican:
identificar, analizar e interpretar problemas prioritarios de la realidad educativa y social; aplicar
y validar enfoques y modelos teórico y metodológicos; experimentar modelos, métodos,
estrategias y técnicas pedagógicas, que permitan innovar y mejorar la calidad educativa.
Habilidades del Docente
Según Alcalde (2014), en pleno siglo XXI, lleno de abundancia cognitiva, el docente
debe ser consciente de las nuevas habilidades que implica su rol. Su tarea principal es educar y
transmitir un cúmulo de conocimientos a sus estudiantes. Por ello, tiene que pensar en enriquecer
su acervo profesional, sus conocimientos, habilidades, métodos educativos y pedagógicos que lo
hagan más eficientes en el proceso de desarrollo educativo y cognitivo de sus aprendices. Así, el
docente debe considerar el aula de clase como el lugar idóneo para investigar, experimentar,
modelar, compartir ideas, tomar decisiones, resolver problemas y reflexionar sobre lo que es
necesario y pertinente para el aprendizaje.
Toma de Decisiones
Stoner et al. (2007) definen la toma de decisiones como el procedimiento para identificar
y solucionar una determinada acción que requiere de la intervención del gerente, para resolver
problemas específicos dentro de la organización. Al respecto, Ronzoni (2009) destaca al docente
como principal mediador de conocimientos; debe decidir, transformar y facilitar el proceso de
aprendizaje, proporcionando acceso al mundo cultural, científico, histórico, moral y social,
orientando al estudiante al cambio dentro de su ámbito social, valorando la agilidad, creatividad
del pensamiento y resolución de problemas dentro de los procesos pedagógicos.
Desarrollo de Competencias
En opinión de Olaves (2009), las competencias son tareas y actividades, son resultados;
es decir, son habilidades para obtener un resultado, para producir beneficios. En el contexto
educativo, este término se refiere a la capacidad de hacer con saber y con conciencia. Así, las
competencias docentes son un conjunto de saberes, destrezas, comportamientos, valores,
adquiridos por el educador, utilizables para enfrentar situaciones escolares dentro y fuera del
aula.
En tal sentido, Araujo (2016) plantea que el desarrollo de estas competencias depende de
una docencia centrada en el aprendizaje a partir del uso de diversas estrategias vinculadas con la
realidad; “ser competente implica tener la atribución para tratar acerca de algo o resolverlo, ser
experto o tener conocimiento sobre alguna situación” (p. 184).
Valores Fomentados por el Docente en el Aula
Las instituciones educativas son las encargadas de practicar diariamente los valores
sociales, éticos y morales, fomentados por el docente dentro del aula, mediante el uso de
estrategias de convivencias como dinámicas de integración de grupos, participando entre todos
los alumnos sin exclusión, que ayudarán a generar cambios entre ellos.
Según lo enunciado por Arufe (2011), los valores, ligados a los términos como creencias,
normas, actitudes, principios, son usados indiscriminadamente, pero tienen sus diferencias
particulares. Los valores se comunican en distintos procesos de interacción humana, ya sea entre
personas, organizaciones, sociedad, cultura, política o economía. Particularmente, el aula es un
medio para fomentar valores, al abordar los contenidos conceptuales, procedimentales, dando
protagonismo a los actitudinales. A través de la disciplina de educación física, se pueden generar
valores positivos como el cuidado de la salud, disciplina, esfuerzo, responsabilidad, legalidad,
tolerancia, paz.
Valores cognoscitivos
Los valores cognoscitivos son comportamientos presentados por el ser humano y
desarrollados de manera personal, dentro de la sociedad donde se desenvuelven. Cáceres y
Munérva (2016) señalan que dentro de la formación personal de cada individuo el desarrollo
cognoscitivo es fundamental, centrado en aplicar valores sociales que nacen de la importancia
del ser social, de acuerdo al desarrollo pleno del seno familiar. Las teorías cognitivas determinan
que los diferentes procesos del aprendizaje pueden ser explicados mediante el análisis de los
procesos mentales, la influencia del medio ambiente y las actitudes de educadores y educandos.
Conductas del ser
La conducta de cada ser humano es parte de la relación entre el yo interior y las personas
de su entorno social, que buscan compartir situaciones y experiencias de la vida diaria.
Acosta (2017) refiere que la educación es una labor exigente y compleja, un reto y una
tarea comprometedora, realizada en función y al servicio de los seres humanos, que, al cumplir
una serie de normas, contribuye a fortalecer los principios éticos y morales de los estudiantes.
Sin embargo, es importante tener claro que como seres humanos son dueños de sus decisiones y
de sus proyectos de vida, perfeccionados con la acción educativa. Así, la escuela tiene un papel
fundamental en la transmisión y educación de los valores, debiendo existir una conexión entre el
educador y el educando para poder consolidar estos valores.
Valores éticos-morales
La influencia de los valores éticos-morales representa un amplio orden social debido a que
son principios que orientan el comportamiento de cada individuo. Son creencias fundamentales
que ayudan a seleccionar algunas cosas en lugar de otras, de acuerdo a la personalidad propia.
En este contexto, Rojas et al. (2020) refieren que un docente tiene que educar desde una
perspectiva universal y no bajo una creencia religiosa o una ideología política; debe formar
valores humanos y sentidos compartidos socialmente, con liderazgo transformacional,
fomentando la responsabilidad, honestidad, integridad, valoración personal, bienestar, relaciones
interpersonales, armonía, fraternidad, empatía, formación ciudadana, manejo y resolución de
conflictos, solidaridad, proactividad, excelencia académica, normas culturales, entro otros
valores éticos-morales.
Metodología
La investigación se encuentra enmarcado en el paradigma positivista, con enfoque
cuantitativo y alcance descriptivo, ya que busca especificar propiedades y características de un
grupo de individuos en un contexto determinado, estimando magnitudes y ocurrencia de los
fenómenos analizados (Hernández-Sampieri & Mendoza, 2018).
En relación con el diseño, el estudio correspondió al no experimental, transaccional
(transversal) y de campo. No experimental, debido a que el investigador observó los fenómenos
tal y como ocurren naturalmente sin intervenir en su desarrollo; transversal, debido a que la
variable educación en valores se da en un solo momento, contexto y espacio; de campo, ya que
la recolección de datos fue directamente de los sujetos investigados y donde ocurren los hechos
(Hernández-Sampieri & Mendoza, 2018; Arias, 2016; Hurtado, 2010).
En la Tabla 1 se muestra la operacionalización de la variable de estudio, sus dimensiones
e indicadores.
Tabla 1
Operacionalización de la variable
Variable
Dimensiones
Indicadores
Educación en Valores
desde la
Educación Física
Pedagogía en valores
Principios Orientadores
Medios de Organización
Rol del docente
Orientador
Promotor social
Investigador
Habilidades del docente
Toma de decisiones
Desarrollo de competencias
Fortalecimiento de la
enseñanza-aprendizaje
Valores fomentados por el
docente
Valores cognoscitivos
Conductas del ser
Valores éticos-morales
Nota. Los autores (2025).
La muestra estuvo conformada por ciento sesenta y dos (162) sujetos de las instituciones
de Básica Secundaria: Colegio Distrital Esther de Peláez, Institución Educativa Distrital (I.E.D.)
Nuestra Señora del Rosario y Colegio de Barranquilla, señalándose que las tres instituciones
están ubicadas en la ciudad de Barranquilla, Colombia, tal como se especifica en la Tabla 2.
La técnica de recolección de datos utilizada fue la encuesta y como instrumento un
cuestionario conformado por treinta y tres (33) ítems de preguntas cerradas de selección simple,
utilizando la escala tipo Likert con 5 alternativas de respuestas: Siempre (5), Casi siempre (4),
Algunas veces (3), Casi Nunca (2) y Nunca (1). A este instrumento se le aplicaron criterios de
validez de contenido y confiabilidad, resultando apto y altamente confiable para su aplicación.
Tabla 2
Distribución de la muestra
Instituciones Educativas
Docentes
Estudiantes
Total
Colegio Distrital Esther de Peláez
03
47
50
I.E.D. Nuestra Señora del Rosario
03
49
52
Colegio de Barranquilla
03
57
60
Total
09
153
162
Nota. Elaboración propia (2025).
Se tabularon los resultados colocando los valores correspondientes a las respuestas
emitidas por los integrantes de la muestra. El análisis de los datos se realizó con el paquete
computarizado SPSS versión 22.0, a través de criterios de estadística descriptiva, mediante
frecuencia absoluta (F), porcentaje (%) y media aritmética (M). La Tabla 3 muestra el baremo
utilizado para la interpretación de M.
Tabla 3
Baremo para la interpretación de la Media Aritmética (M)
Interpretación
Nada Importante
Poco Importante
Moderadamente importante
Importante
Muy importante
Nota. Elaboración propia (2025).
Resultados y discusión
Los resultados obtenidos para la variable Educación en Valores desde la Educación
Física, con sus diferentes dimensiones e indicadores establecidos en la Tabla 1, se muestran a
continuación.
La Tabla 4 presenta los resultados de la dimensión Pedagogía en Valores. Con relación al
indicador Principios Orientadores, el 25% de las personas encuestadas opinaron que siempre se
actúa de manera ética frente a situaciones de la organización; el 27% percibe que casi siempre se
actúa de esa forma y se aplican estrategias en el aula, donde prevalezca el respeto entre los
estudiantes; contrariamente un 38% considera que algunas veces, un 8% optaron por la opción
casi nunca, y otro 2% nunca. La M del indicador fue 3.65 que al compararla con el baremo
diseñado se considera como Importante dentro de las categorías establecidas para el análisis.
Tabla 4
Dimensión: Pedagogía en valores
Indicador
Siempre
Casi
Siempre
Algunas
Veces
Casi Nunca
Nunca
Totales
M
F
%
F
%
F
%
F
%
F
%
F
%
Principios
Orientadores
40
25
44
27
62
38
12
8
3
2
162
100
3.65
Medios de
Organización
35
22
53
33
58
36
12
8
4
2
162
100
3.64
Promedio de M
3.65
Nota. Elaboración propia (2025).
Con respecto al indicador Medios de Organización, se denota una tendencia diferente que
el anterior indicador, donde que el 22% de las personas encuestada opinaron que siempre se
utilizan estrategias para organizar las actividades académicas de sus estudiantes y emplean
archivos en la web para organizar las evaluaciones, otro 33% percibe como casi siempre,
mientras un 36% considera que algunas veces tienden a utilizar las fuentes externas, un 8% casi
nunca, y un 2% nunca. La M del indicador fue de 3.64 que al compararla con el baremo se
considera como Importante.
De acuerdo a los resultados se denota que la M de la dimensión arrojó un valor de 3.65 y
según el baremo es Importante, esto refleja que los docentes de básica secundaria en
Barranquilla, planifican actividades para incentivar el valor de la solidaridad entre los
estudiantes.
En la Tabla 5, correspondiente a la dimensión Rol del Docente, se puede visualizar el
comportamiento del indicador Orientador, en el cual se analizó si los estudiantes de educación
básica secundaria se orientan en las actividades como parte de su proceso académico. El 22%
opina que siempre se considera que los procesos académicos deben de estar orientados para
obtener mejores resultados. Por otro lado, el 30% considera que casi siempre se utilizan, un 33%
algunas veces, un 9% casi nunca, y un 6% nunca. La M del indicador fue de 3.53 que al
comparar con el baremo se categorizó como Importante.
Tabla 5
Dimensión: Rol del docente
Indicador
Siempre
Casi
Siempre
Algunas
Veces
Casi Nunca
Nunca
Totales
M
F
%
F
%
F
%
F
%
F
%
F
%
Orientador
36
22
48
30
53
33
15
9
10
6
162
100
3.53
Promotor
Social
33
21
66
41
44
27
13
8
5
3
162
100
3.67
Investigador
32
20
31
19
51
31
22
14
26
16
162
100
3.13
Promedio de M
3.45
Nota. Elaboración propia (2025)
Para el indicador Promotor Social, donde se observó si en las instituciones se realizan
encuentros comunitarios como parte de la labor docente, se denotó que el 21% opina que siempre
se realizan dichos encuentros. Por otro lado, el 41% considera que casi siempre se llevan a cabo,
un 27% percibe como algunas veces, un 8% como casi nunca, y un 3% nunca. La M del
indicador fue de 3.67 que al comparar con el baremo se categorizó como Importante.
Respecto al indicador Investigador, orientado a observar si en las instituciones se realizan
actividades dentro del aula para incentivar la investigación en sus estudiantes, se obtuvo que el
20% opinan que siempre se realizan. Por otro lado, el 19% considera que casi siempre se llevan a
cabo estas actividades, un 31% percibe que algunas veces, un 14% casi nunca, y un 16% nunca.
La M del indicador fue de 3.13 que al comparar con el baremo se categorizó como
Moderadamente importante.
De acuerdo a los resultados se revela que la M de la dimensión arrojó un valor de 3.45 y
según el baremo se corresponde con Importante, lo que induce que los docentes de básica
secundaria en Barranquilla, cumplen con sus roles principales de manera satisfactoria.
En la Tabla 6, correspondiente a la dimensión Habilidad del Docente, se observa el
comportamiento del indicador Toma de Decisiones, en el cual se analizó si los estudiantes de
educación básica secundaria analizan las decisiones antes de ponerlas en práctica. Así, el 26%
opinan que siempre se analizan esas decisiones; el 16% considera que casi siempre se llevan a
cabo, un 32% algunas veces, un 14% casi nunca, y un 12% percibe que nunca. La M del
indicador fue de 3.31 que al comparar con el baremo se categorizó como Moderadamente
Importante.
Con respecto al indicador Desarrollo de Competencias, en el cual se observó si en las
instituciones se considera sus competencias laborales para ponerlas en práctica con sus
estudiantes, se obtuvo que el 38% opina que siempre se consideran dichas competencias; el 25%
considera casi siempre, un 28% percibe que algunas veces, un 7% como casi nunca, y un 1%
nunca. La M del indicador fue de 3.92 que al comparar con el baremo se categorizó como
Importante.
Tabla 6
Dimensión: Habilidad del docente
Indicador
Siempre
Casi
Siempre
Algunas
Veces
Casi Nunca
Nunca
Totales
M
F
%
F
%
F
%
F
%
F
%
F
%
Toma de
Decisiones
43
26
26
16
51
32
22
14
20
12
162
100
3.31
Desarrollo de
Competencias
62
38
41
25
45
28
11
7
2
1
162
100
3.92
Fortalecimiento
de la
enseñanza-
aprendizaje
25
15
9
6
56
35
63
39
9
6
162
100
2.86
Promedio de M
3.36
Nota. Elaboración propia (2025)
Para el indicador Fortalecimiento de la Enseñanza-Aprendizaje, dirigido a observar si las
instituciones contribuyen a mejorar las prácticas educativas orientando a sus estudiantes, se
denotó que el 15% opinan que siempre sirven de guía a sus estudiantes para fortalecer su proceso
de enseñanza aprendizaje; el 6% considera que casi siempre se llevan a cabo estas actividades,
un 35% que algunas veces, un 39% casi nunca, y un 6% percibe que nunca. La M del indicador
fue de 2.86 que se corresponde con Moderadamente importante.
La Tabla 7 refleja la dimensión Valores Fomentados por el Docente, en el caso del
indicador Valores Cognoscitivos, en el cual se analizó si los estudiantes de educación básica
secundaria controlan sus emociones cuando se presenta una dificultad en el aula. Se denota que
el 29% opina que siempre se actúa de manera racional ante cualquier situación que se presente;
el 32% la considera que casi siempre se llevan a cabo, un 32% algunas veces, un 5% casi nunca,
y un 1% percibe que nunca. La M fue de 3.82 que al comparar con el baremo se categorizó como
Importante.
Tabla 7
Dimensión: Valores fomentados por el docente
Indicador
Siempre
Casi
Siempre
Algunas
Veces
Casi Nunca
Nunca
Totales
M
F
%
F
%
F
%
F
%
F
%
F
%
Valores
Cognoscitivos
47
29
52
32
52
32
8
5
2
1
162
100
3.82
Conductas del
Ser
44
27
63
39
43
27
8
5
4
3
162
100
3.82
Valores Ético-
Morales
43
27
49
30
38
24
16
10
16
10
162
100
3.54
Promedio de M
3.73
Nota. Elaboración propia (2025)
Para el indicador Conductas del Ser, en el cual se observó si en las instituciones se
cumple con las normas como parte de su responsabilidad con los estudiantes; se obtuvo que el
27% opina que siempre se consideran dichas competencias; el 39% considera que casi siempre se
toma en consideración, un 27% como que algunas veces, un 5% como casi nunca, y un 10%
percibe que nunca. La M del indicador fue de 3.82 que al comparar con el baremo se categorizó
como Importante.
Respecto al indicador Valores Éticos-Morales, orientado a observar si en las instituciones
se considera que su comportamiento va de la mano con los valores que pone en práctica, que se
obtuvo que el 27% opinan que siempre sirven de guía a sus estudiantes para fortalecer su proceso
de enseñanza aprendizaje; el 30% considera que casi siempre se llevan a cabo estas actividades,
un 24% percibe que algunas veces, un 10% casi nunca, y un 10% que nunca. La M del indicador
fue de 3.54 que al comparar con el baremo se categorizó como Importante.
El análisis de los resultados presentados en las tablas referenciadas, permitieron
corroborar la importancia que la Educación Física tiene en el fortalecimiento de valores en los
estudiantes de básica secundaria en Barranquilla, Colombia, ya que en la medida que los
docentes orienten su formación académica, haciendo énfasis en una pedagogía en valores,
enfocada en los principios orientadores y los medios de organizarlos dentro y fuera del aula,
podrán incentivar en los estudiantes valores de la solidaridad, amistad y responsabilidad entre
ellos.
A partir de la Educación en Valores desde la Educación Física, las habilidades que
maneje el docente a partir del desarrollo de competencias y la toma de decisiones, como aspectos
fundamentales para el fortalecimiento de la enseñanza aprendizaje, se podrán fortalecer los
valores cognitivos, éticos y morales en los estudiantes, lo cual servirán de apoyo en el
mejoramiento de su conducta como ser humano, durante su acción académica y social diaria.
Hay suficientes razones para considerar lo importante del rol del docente desde su
función como promotor social, orientador e investigador, para una adecuada educación en
valores, tomando en cuenta los fundamentos físicos y recreativos de la educación física. Estas
reflexiones se corresponden con planteamientos de Sarramona (2008), UNIR (2024), Frabboni
(2010), Arana & Batista (2015), Arufe (2011), Olaves (2009), Mujica-Sequera (2015), Morillo et
al. (2019), González (2018), Del Pozo et al. (2017), Farías-Veloz et al. (2022), Delgado &
Alfonzo (2019), Alcalde (2014), Ronzoni (2009), Araujo (2016), Cáceres y Munérva (2016),
Acosta (2017), Rojas et al. (2020).
Conclusiones
Luego de realizar el análisis de los resultados se concluye que la Educación en Valores y
su integración con la disciplina Educación Física es una oportunidad enriquecedora para los
estudiantes, considerando su carácter entretenido y amigable, y de la práctica de actividades
físicas, deportivas y recreativas propias de esta disciplina. A partir de las actividades realizadas
por el docente en su práctica pedagógica, se promueven los principios orientadores y medios de
organización, centrando su finalidad en incentivar los valores de solidaridad, honestidad,
integridad, armonía, fraternidad, cooperación, respecto, tolerancia, empatía, proactividad y
amistad entre ellos y también con sus docentes.
Se considera necesario revisar el rol del docente que conlleva a fortalecer una auténtica
educación en valores desde la disciplina de educación física en estudiantes de básica secundaria,
y para lo cual es ineludible afianzar su acción pedagógica en sus roles de promotor social,
orientador e investigador. Así mismo, a partir de la caracterización de las habilidades del docente
se puede afirmar que, en las instituciones educativas analizadas, los docente y estudiantes
muestran destrezas en el desarrollo de competencias y toma de decisiones, que le puedan ayudar
al fortalecimiento del proceso de enseñanza aprendizaje, así como de valores cognoscitivos y
conductas del ser, y de manera general fomentar los valores sociales, éticos y morales, que tanto
requiere la sociedad actual.
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