30 años formando investigadores de la comunicación: Un diálogo con el Dr. Eugenio Sulbarán
Como parte de las celebraciones por el 30 aniversario de la Maestría en Comunicación, hemos dedicado un espacio especial para compartir las palabras que el Dr. Eugenio Sulbarán, coordinador de este programa de estudio, ha decidido otorgar en una entrevista.
D.C: ¿Cómo surgió la idea de crear una Maestría en Comunicación en esta
MSc. Deris Cruzco
institución hace 30 años?
Dr. Eugenio Sulbarán (Coordinador de la Maestría en Comunicación - LUZ). Foto: Prensa Baralt
E.S: “Los profesores de la Escuela de Comunicación Social que estaban estudiando en el exterior, específicamente en la Universidad Autónoma de Barcelona (España), regresaron de hacer sus estudios doctorales y fueron ellos quienes emprendieron el desarrollo de la creación de la Maestría en Ciencias de la Comunicación, en tres áreas específicas: Gerencia de la comunicación, Nuevas Tecnologías de la Información y Sociosemiótica de la Comunicación y la Cultura”.
D.C: ¿Cuáles fueron los principales impulsores y motivaciones?
E.S:"La principal impulsora del programa de maestría fue la Dra. Migdalia Pineda, quien se dedicó a desarrollar la creación de la titulación del posgrado a principios de los años 90 (…) La profesora reunió a un conjunto de doctores de diferentes áreas que estaban no solamente en la Escuela de Comunicación Social, sino también en la Facultad Experimental de Ciencias."
D.C: ¿Quiénes fueron los que desarrollaron las menciones que originalmente tenía la maestría?
E.S:"La maestría empezó con tres menciones que se mantuvieron hasta principios este siglo y, para consolidar el área de Sociosemiótica, la comisión encargada de la creación de este programa tuvo que recurrir a los doctores Lourdes Molero de Cabeza, Julián Cabeza, José Enrique Finol e Iván Ávila, docentes de la Facultad Experimental de Ciencias de la Universidad del Zulia, pues habían desarrollado importantes investigaciones en el área de la semiótica y el análisis del discurso.
En la mención de gerencia, quien apoyó mucho fue el Dr. Luis Rodolfo Rojas y el magíster Sirio Valbuena –ambos de la Escuela de Comunicación Social– que apoyaron de un modo u otro esa mención. También tuvieron que recurrir a profesores externos, como la Dra. Gloria Cuenca (de la UCV), especialista en planificación de la comunicación y, en el área de tecnología, recurrieron a las Rosa María Salón y María Isabel Neuman (…) también a la Dra. Emperatriz Arreaza, que venía de la Facultad de Ciencias Jurídicas y Políticas. Un año despué se incluyó también Dra. María Inés Mendoza.".
D.C: ¿Cuáles eran los principales objetivos y expectativas del programa de maestría?
E.S: “Los principales objetivos del programa eran más que todo formativos. Todos los objetivos generales del programa estaban centrados en formar a profesores capacitados para la enseñanza y la investigación en el área de la comunicación (…) y en la búsqueda de la solución de problemas en las organizaciones del sector productivo –o empresaria– tanto público como privado."
D.C: Actualmente, ¿Cuál considera que son los principales desafíos que tiene el programa?
E.S:"Tres específicamente: el asunto de la actualización de la normativa nacional sobre las titulaciones de posgrado y los reglamentos internos, la evolución de la tecnología y el cambio constante de los procesos gerenciales, que deben integrarse para responder a las necesidades curriculares del momento."
D.C: ¿Cuáles son los aportes que han hecho los egresados al programa al campo de la comunicación?
E.S:"En cuanto a los aportes, básicamente han sido en la producción del conocimiento científico, pero más que todo en la socialización de esos conocimientos. De la maestría, hay varios egresados que han ganado premios regionales, nacionales e internacionales, tanto profesores como estudiantes. Principalmente, la docencia y la investigación son las áreas en las que más se han conseguido las premiaciones, tanto en el gremio periodístico como en ciencia y tecnología: Específicamente, la profesora Migdalia Pineda fue la última que ganó este premio con unas de sus publicaciones sobre la teoría de la comunicación y las TIC.
D.C: ¿Qué tendencias ve en el futuro de la comunicación y cómo se está preparando el programa para enfrentar esos cambios?
E.S: "Hace cuatro años se cambió el plan de estudio como producto de un proceso de evaluación previo correspondiente a diez años de actividad académica. En este plan se unificaron las anteriores menciones y se integraron, además, líneas de investigación sobre periodismo, industrias culturales y comunicación persuasiva. Así, as crearon asignaturas y seminarios pensando más en esas tendencias futuras. Sin embargo, la maestría tiene que evaluarse constantemente para ajustar esos cambios del mercado, de las comunicaciones y del contexto educativo, en general.
D.C: ¿Qué significa para usted haber sido coordinador de este programa
durante tantos años?
E.S: "Han sido diez años al frente. Yo creo que ha sido un reto (…) Un reto y mayor desafío, sobre todo, porque siendo egresado de la primera cohorte me encontré con una maestría totalmente estructurada, con una planta docente fortificada con doctores en distintas áreas del saber comunicativo
y que, con el correr de los años, por cuestiones contextuales y personales,
salieron del programa sin consolidarse a tiempo una generación de relevo.
También ha sido un gran desafío porque, como coordinador, me tocó evaluar la maestría en comunicación –algo que nunca se había hecho, a pesar de las normas y exigencias internas– sin ser un curricultor, o especialista en currículo. Esa evaluación fue arriesgada porque se seleccionó un período que incluía un proceso de masificación de la maestría, producto de la internacionalización del programa, y cohortes en distintos puntos geográficos del país. Por supuesto, el desafío fue también evaluar las diferentes cortes que se crearon en ese momento o que existían en ese momento en diferentes partes de Venezuela, pero también cortes en el norte de Colombia, específicamente de Barranquilla.
Igualmente fue un poco complicado ajustar el plan de estudio a las necesidades del mercado ocupacional actual porque, precisamente, aunque el perfil de la maestría siempre ha venido cumpliendo con sus objetivos desde sus inicios, se debía crear un plan de estudio más acorde con las dinámicas actuales del mercado en materia de comunicación, pero con orientación académica; no profesionalizante".
D.C: ¿Qué aprendizajes personales y profesionales ha obtenido a lo largo de este recorrido?
E.S: "Yo creo que el aspecto positivo de ser coordinador es la posibilidad de conocer a tantos profesionales deseosos de seguir investigando, de seguir formándose, de obtener una credencial, de fortalecer sus capacidades académicas. Eso habla de un profesional que está ávido de continuar su formación como tal y que, como coordinador, se tiene la posibilidad de ofrecer un programa un poco más abierto a satisfacer esas necesidades.
Desde lo interno, por supuesto, el aprendizaje ha sido importante en cuanto al conocimiento que debe tener la coordinación de las normas internas, de las regulaciones nacionales relacionadas con la creación, desarrollo y ejecución de los programas de posgrado en Venezuela. Ha sido también muy significativo en el ámbito de la internacionalización, sobre todo porque el compartir de saberes; es decir, el programa, al ser internacional, se convierte en un programa intercultural: hay una transmisión y combinación
de saberes compartidos desde diferentes contextos, aunque muy cercanos. En el caso concreto, entre Venezuela y Colombia.
Además, el hecho de aprender cuestiones relacionadas con el currículum fue también significativo. Ese aprendizaje no solamente motiva al coordinador a seguir investigando sobre la creación de planes de estudios relacionados con la comunicación, sino también con los procesos de articulación académica; es decir, cómo se articula el pregrado con el posgrado, tema que han permanecido prácticamente al margen de muchos análisis y estudios curriculares en Venezuela."
Luego de finalizada esta entrevista con el profesor Eugenio Sulbarán, resulta evidente que a lo largo de estas tres décadas de historia, la Maestría en Comunicación de La Universidad del Zulia se ha convertido en un referente regional obligado en lo que a formación de profesionales en el área de la comunicación se refiere.
Durante la conversación con el catedrático, se hace palpable el efecto histórico que ha tenido el compromiso por parte de un equipo de docentes visionarios y competentes que han procurado adaptarse a los constantes cambios del entorno comunicacional, manteniendo siempre como norte la excelencia académica y la pertinencia social.
Hoy, al celebrar este aniversario, reconocemos el valioso legado de quienes hicieron posible este sueño -algunos siguen entre nosotros, pero otros ya han partido de este plano - y miramos hacia el futuro con optimismo, seguros de que esta maestría continuará formando profesionales altamente capacitados para enfrentar los desafíos de la comunicación en el siglo XXI.
Deris Cruzco
Editora de Quòrum Académico