
Rev. Téc. Ing. Univ. Zulia. Volumen Especial, 2019, No. 1, pp. 154-262
214 Gonzàlez y col.
Introducción
geomorfológicamente activa, donde interactúan múltiples
y complejos procesos que repercuten en la estabilidad
del terreno y seguridad de la población. Los procesos
son interactivos, convergentes, dinámicos, profundos y/o
condiciones climáticas, la heterogeneidad de la litología,
la ubicación de las unidades morfológicas y las estructuras
presentes en el área de estudio, entre otros.
El objetivo principal de esta investigación
es encontrar evidencias en campo de los vestigios de
actividad tectono-estructural que dan paso al origen del
corrimiento de Mesa Bolivar y las estructuras andinas
asociadas.
El área de estudio se encuentra ubicada en Los
Andes Centrales Venezolanos, en la Parroquia Chiguará
del Municipio Autónomo Sucre del Estado Mérida (Figura
1), al norte de la Falla de Boconó formando parte de la
cuenca media del Río Chama en su margen derecha aguas
abajo. Con una altura promedio de 924 m.s.n.m., Chiguará
está localizada a 45 minutos al suroeste de Mérida y a 15
minutos de El Vigía, entre las coordenadas 8º27’53’’ y
8º38’19’’ de latitud norte y a los 70º59’14” y 71º36’20” de
2.
Figura 1. Imagen radar indicando la ubicación de la zona
de estudio.
Interpretación fotogeológica y geomorfológica
El análisis e interpretación de los pares
estereoscópicos de la Misión Nº 010480, contentiva de las
fotos Nº 982, 984, 986, 988, escala 1:35.000; de la Misión
Nº 010487, escala 1:5000, franjas de fotos: 013-021, 027-
036, 040-049, 051-060 y de la Misión Nº 010380, fotos Nº
520 y 521, escala 1:50.000, del Estado Mérida, permite
vertiente de montañas y otra de fondo de valle, ambas bajo
el estricto dominio estructural, acompañado de múltiples
Aunque casi toda la zona estudiada presenta las
mismas características morfo-estructurales, se procede a
detalle los aspectos estructurales y geomorfológicos.
El sector Nº 1, inferior (Figura 2), abarca las áreas
Chiguará, El Tejar, Loma del Medio, carretera nueva de
Chiguará y alcabala de El Anís, caracterizado por pendientes
ésta, con carácter estacional, de media a alta densidad y
las áreas de rellenos aluviales), presentando marcados
surcos de escorrentías (cárcavas), las cuales se presentan
en distintas locaciones del sector. Cabe destacar, que este
fenómeno ocurre también predominantemente sobre las
Dentro las geoformas observadas hacia las
zonas, por donde pasa el Corrimiento de Mesa Bolívar
(El Hato, Loma del Medio, carretera nueva) y donde se
altas, alargadas, de bases anchas, cimas angulares y con
relieves fuertes, tonalidades de grises medios a oscuros,
escasa, del tipo arbustivo. Hacia las restantes áreas del
cretácicas, se observa una pendiente de media a fuerte,
favoreciendo los deslizamientos y procesos erosivos,
evidenciándose desarrollos activos de movimientos
de masas, tales como: derrumbes, deslizamientos de
pequeñas dimensiones, surcos y cárcavas, además de
nichos o coronas inactivas y grietas tensionales que
pueden provocar deslizamientos.
de grises, estableciendo el color gris claro como indicativo
de las areniscas y calizas, los grises oscuros de las lutitas
y calizas organógenas. La red hídrica corresponde a un
Existe un control predominantemente estructural
(Figura 2), con presencia, además del Corrimiento de Mesa
dos fallas, mencionadas en éste estudio como:
La primera, que pasa por el área de El Tejar y la
cual se llamará “Falla de El Tejar” y la segunda, que pasa
por las áreas denominadas: La Aguada, Bella Vista y Cerro
(Figura 2). Al mismo tiempo, se evidencia una falla inversa
que pasa por las áreas denominadas San Pedro, Buruquel,
San José y la Quebrada La Sucia, y que se denominará
“Falla de San José” (Figura2). Es de hacer notar, que entre
estas fallas, se evidencia una serie de fallas normales e